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La sabiduría del agua:

protegiendo los ecosistemas de agua dulce de la Selva Maya

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La luz del inframundo Rayos de luz atraviesan el silencio de un cenote, iluminando su misterio ancestral y revelando la conexión entre el mundo exterior y las profundidades sagradas del agua © TNC México

En el corazón de Mesoamérica se encuentra un paisaje notable donde la naturaleza y las personas han coexistido durante milenios: la Selva Maya. Esta región icónica se extiende por México, Guatemala y Belice, abarcando la mayor reserva de agua dulce de Mesoamérica. La Selva Maya es hogar de una vibrante biodiversidad y de comunidades que han protegido su abundancia natural a lo largo de generaciones, basándose en el conocimiento ancestral y en profundas conexiones con la tierra.

© TNC México

Un paisaje diverso rico en agua y vida

Los ecosistemas de agua dulce de la Selva Maya son un mosaico de ríos, entornos ribereños, humedales y los singulares “cenotes”: profundas dolinas naturales interconectadas a través de una vasta red de ríos subterráneos. Este sistema interconectado juega un papel crucial en el apoyo a la biodiversidad, proporcionando servicios ecosistémicos vitales y asegurando la disponibilidad de agua para más de 11 millones de personas en tres países.

Sin embargo, la importancia del agua en este paisaje va más allá de su valor ecológico. Es un pilar cultural para muchas comunidades indígenas, incluidos los mayas, que han habitado la región durante miles de años. Para ellos, el agua representa vida, sustento y una profunda conexión espiritual con el mundo natural. Hoy en día, estas comunidades continúan honrando prácticas tradicionales de gestión que han preservado la riqueza natural de la región.

A la luz dorada del atardecer, un grupo de flamencos se desplaza elegantemente sobre las tranquilas aguas, creando un momento mágico
Atardecer entre flamencos A la luz dorada del atardecer, un grupo de flamencos se desplaza elegantemente sobre las tranquilas aguas, creando un momento mágico © TNC México

Amenazas a los ecosistemas de agua dulce de la Selva Maya

A pesar de su resiliencia, la Selva Maya enfrenta crecientes amenazas. La expansión agrícola, la inadecuada colecta y acopio de residuos y el desarrollo de infraestructura están degradando los hábitats y contaminando las vías fluviales. El cambio climático, que provoca sequías más prolongadas y frecuentes, ha agravado aún más la escasez de agua, afectando tanto a los ecosistemas naturales como a los medios de subsistencia humanos. La contaminación por aguas residuales no tratadas, así como el escurrimiento de residuos agrícolas, afecta no solo a los sistemas de agua dulce, sino también a la salud de los arrecifes de coral de Mesoamérica, demostrando la profunda conexión entre los entornos terrestres y marinos.

Refugio entre raíces Entre lianas y aguas cristalinas, este rincón del Anillo de Cenotes guarda la esencia de la vida en la península de Yucatán, uniendo naturaleza y cultura. © TNC México

“Anillo de Cenotes”: una reserva de esperanza en Yucatán

Dentro de la Selva Maya, la reserva geohidrológica “Anillo de Cenotes” en Yucatán se erige como un área vital para la conservación. Esta reserva estatal, establecida en 2013, protege más de 200,000 hectáreas y asegura el suministro de agua para Mérida, una de las ciudades de más rápido crecimiento en México. Reconociendo la relación única entre el agua y la naturaleza, la reserva alberga 31 sitios RAMSAR, siendo una región de importancia global para la conservación del agua y la biodiversidad.

La reserva es un microcosmos de los desafíos y soluciones que se observan en toda la Selva Maya. Está habitada por más de 100,000 personas, incluidos diversos grupos étnicos como los mayas, que dependen de sus recursos naturales. The Nature Conservancy (TNC) México, en conjunto con gobierno, comunidades y organizaciones locales, ha liderado iniciativas para analizar la calidad del agua, con el objetivo de comprender el impacto de las actividades humanas en estos recursos vitales. A través de la cooperación, se recolectaron muestras de agua en toda la reserva, fomentando un sentido de responsabilidad compartida y gestión ambiental.

Construyendo alianzas para la conservación

En el corazón del “Anillo de Cenotes”, la colaboración ha sido el motor que impulsa las iniciativas de conservación. Las comunidades locales no solo han permitido el acceso a sitios clave para el monitoreo del agua, sino que han mostrado un profundo compromiso por entender cómo sus actividades impactan la calidad de este recurso vital. Esta sinergia es un recordatorio de que las soluciones más duraderas nacen cuando las personas y la naturaleza trabajan juntas hacia un objetivo común: proteger el futuro de sus territorios.

Un ejemplo claro es el trabajo con productores apícolas y agricultores, quienes, con el apoyo de TNC México, han implementado prácticas como la gestión de residuos y esfuerzos de restauración en áreas estratégicas. Estas acciones no solo aseguran que las abejas —guardianas esenciales de los ecosistemas— tengan acceso a áreas saludables para recolectar polen y néctar, sino que también refuerzan la idea de que una selva saludable garantiza actividades sostenibles y medios de vida prósperos para las comunidades.

El impacto de la conservación no se detiene ahí. TNC México también colabora con jóvenes y sus familias para fomentar habilidades prácticas que promuevan la sostenibilidad, como la gestión de aguas residuales domésticas, la cosecha de agua de lluvia y el uso de plantas multipropósito. Al involucrar a las nuevas generaciones, se busca sembrar no solo conocimientos técnicos, sino también una conexión más profunda con su entorno. Estas herramientas les permiten integrar la sostenibilidad en su vida diaria, desde el manejo responsable del agua hasta la preservación de los recursos que los rodean.

Entre estas iniciativas, destaca el trabajo de un grupo inspirador: los Ha’kanules o “Guardianes del Agua”. Este colectivo de jóvenes locales ha asumido la tarea de proteger los cenotes de la reserva mediante actividades como la limpieza de áreas aledañas, el monitoreo de la calidad del agua y la difusión de información entre sus comunidades. Con su liderazgo, no solo refuerzan el vínculo entre las personas y el agua, sino que también honran las tradiciones de sus antepasados, adaptándolas a los retos actuales.

En los Ha’kanules, TNC México ha encontrado aliados con la capacidad de transformar la relación entre la sociedad y el medio ambiente. Aunque el camino por recorrer es largo, cada paso —cada alianza, cada acción— reafirma que estamos en la dirección correcta. Juntos, estamos construyendo un futuro donde la naturaleza y las comunidades prosperen lado a lado, respetando el pasado y trabajando hacia un mañana sostenible.

Puerta al corazón de la tierra Desde el interior del cenote, la entrada se revela como un umbral natural que conecta la luz del exterior con la serenidad de las profundidades. © TNC México

Mirando hacia un futuro sostenible

La historia de la Selva Maya es una de interconexión: entre personas, naturaleza y agua. Adoptando un enfoque “de la montaña al arrecife”, el trabajo de TNC México destaca la necesidad de conservar no solo elementos individuales, sino sistemas completos. Los ecosistemas de agua dulce saludables son esenciales para el bienestar de los arrecifes de coral de Mesoamérica, que dependen del agua limpia para sostener la diversidad de la vida marina.

Las iniciativas de conservación en curso en la Selva Maya tienen como objetivo mejorar la calidad del agua, aumentar la biodiversidad y reforzar los lazos culturales que las comunidades locales tienen con la tierra. Al apoyar prácticas que beneficien tanto a las personas como a la naturaleza, hay esperanza para un futuro en el que este paisaje icónico continúe prosperando.

A través de la colaboración, la educación y la sabiduría tradicional, la Selva Maya puede seguir siendo un faro de biodiversidad y patrimonio cultural, un lugar donde tanto la naturaleza como las personas puedan florecer, lado a lado.

Selva Maya El agua es esencial para la vida en la Selva Maya, conectando ecosistemas y comunidades.